El alcalde de Londres, Sadiq Khan, advirtió de que los centros médicos de la capital de Inglaterra pueden presentar saturación ante el fuerte aumento de pacientes con el virus SARS-CoV-2 y declaró la situación como “incidente mayor”, un requisito formal para obtener una respuesta global de varios gobiernos.
“Si no tomamos medidas inmediatas ahora, nuestro servicio nacional de salud podría verse superado y más gente morirá”, aseguró el burgomaestre inglés.
Según detalló el portal RFI, los hospitales del Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus sigla en inglés) están llegando al límite de su capacidad: 30.451 personas están internadas por COVID-19 en el país europeo, una cifra más alta que la alcanzada en abril pasado, cuando se tuvo un pico de 21.684.
En Londres, el 50% de los pacientes que reciben algún tipo de atención sanitaria lo hacen por el virus. Asimismo, más de 2.640 enfermos están conectados a ventilación artificial.
Si el número de pacientes infectados aumentase siguiendo las proyecciones más bajas, para el 19 de enero habría un déficit de 2.000 camas de cuidados generales e intensivos en los hospitales de la capital inglesa, informó Health Service Journal.
La variante del nuevo coronavirus descubierta en Reino Unido se ha extendido e incrementado los contagios identificados en un 33,8% en siete días, con un promedio diario de nuevos casos que supera los 50.000.
El número de casos confirmados en Londres rebasa ya los 1.000 por cada 100.000 habitantes, indicó el ayuntamiento.
“Uno de cada 30 londinenses tiene ahora COVID-19. Por eso, los servicios públicos de Londres instan a todos los londinenses a quedarse en casa, excepto para las compras y el ejercicio absolutamente esenciales”, expresó Georgia Gould, presidenta de los consejos municipales londinense.
La gestión de Boris Johnson se enfoca en la campaña de vacunación, la principal herramienta para hacer frente a la crisis sanitaria. Con esta estrategia, de aquí a mediados de febrero, el NHS espera inmunizar a 14 millones de ciudadanos.