Un cargamento con más de 11 toneladas de troncos de tiburones, especie protegida a escala internacional, que se pretendía ingresar y comercializar ilegalmente en el país, fue intervenido por Oficiales de Aduanas de Tumbes de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat).
El tiburón es una especie marina en peligro de extinción, por lo que es protegida y su venta está prohibida. Según la documentación disponible, el supuesto cargamento de especies marinas, en las que no se declaró su ingreso, ingresó desde el Ecuador.
El trabajo de gestión de riesgos de la Sunat permitió alertar del ingreso del cargamento de especies marinas, procediéndose con la verificación física de las 10 cámaras de conservación, con el apoyo de la Fiscalía del Medio Ambiente, detectando el lote de tiburones. Solo se encontraron los troncos porque las aletas ya habían sido extraídas.
La Sunat precisó que dicha especie tiene una gran demanda en el mercado asiático, donde se comercializan como si se tratara de producto afrodisiaco.
Entre lo incautado se logró identificar varias especies de tiburón como “martillo”, “zorro ojón”, “zorro pelágico” y “diamante”, especies protegidas internacionalmente.
Debido a que se configura un delito aduanero de tráfico de mercancías restringidas, la Fiscalía dispuso la incautación de todo el cargamento y el inicio de las investigaciones para identificar y sancionar a los responsables.
Las más de 11 toneladas fueron puestas a disposición del Ministerio de Producción (Produce) y la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental, que son las entidades responsables de control de estas especies.
No es la primera vez que se realiza una intervención de especies protegidas, debido a ello la Sunat ha intensificado, en los últimos años, sus controles por vía área, marítima, terrestre y fluvial para prevenir el tráfico de fauna y flora protegida queatenta contra nuestro medio ambiente.
