La Comisión Ejecutiva del COI ha rechazado la denuncia de la compañía suiza Sport 7 contra la FIFA, su presidente, Gianni Infantino, y el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) por incumplir el ordenamiento jurídico suizo y los principios de buen gobierno en relación al mercado de transferencias de jugadores.
El COI confirmó que la decisión de adoptó este martes por voto postal, después de las recomendaciones hechas por la Comisión de Ética para rechazar la denuncia.
Respecto a Infantino, que como miembro del COI desde 2020 entra en el ámbito de aplicación de su Código de Ética, la Comisión de Ética consideró que la denuncia únicamente se refería a un análisis general relacionado con la gestión del mercado de transferencias de la Federación Internacional de Fútbol, que queda fuera del ámbito de aplicación del Código de Ética del COI.
«Por lo tanto, a falta de pruebas de hechos concretos de los que se pudiera acusar personalmente al Sr. Gianni Infantino, la Comisión de Ética del COI recomendó que se rechazara la denuncia», señaló el COI en un comunicado.
La denuncia relativa a la FIFA también queda fuera del ámbito de actuación tanto del COI como de su Comisión de Ética, ya que no está relacionada con las relaciones entre el COI y la FIFA, sino con la gestión de esta organización, que es competencia exclusiva de la Federación Internacional.
El COI igualmente señaló que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) está excluido del ámbito de aplicación de su Código de Ética, por lo que la denuncia queda fuera de su ámbito de actuación.
La denuncia fue presentada por carta el pasado 26 de octubre por el abogado suizo Philippe Renz, en representación de la compañía Sport 7, y alega que la FIFA no actuó en estricto cumplimiento de los ordenamientos jurídicos suizos y bajo los principios de buen gobierno en relación al mercado de transferencias de jugadores.
La falta de base legal, según la misma, es origen de la práctica ilícita de remuneración de los clubes a los agentes de jugadores y los consiguientes conflictos de intereses, que pueden constituir infracciones penales, como blanqueo de dinero, evasión fiscal, abusos sobre los jugadores y corrupción.
La Comisión de Ética del COI señaló que la denuncia se basa en un análisis general pero no en hechos concretos y tuvo en cuenta las numerosas respuestas ante estas acusaciones dadas por las distintas autoridades federales suizas entre diciembre de 2017 y mayo de 2020, que no identificaron ninguna infracción de la legislación suiza.