El Ejército israelí confirmó a «Efe» este lunes haber abierto fuego contra «sujetos sospechosos» en Rafah, en el sur de Gaza, mientras que la agencia palestina de noticias «Wafa» denuncia que dos personas murieron en el ataque, que se produce en el segundo día de alto el fuego en el enclave.
«Se identificó a varios sujetos sospechosos que suponían una amenaza contra los soldados que operaban en varias zonas de Rafah de acuerdo con los términos del acuerdo de alto el fuego. Los soldados respondieron con fuego contra ellos», recogió un escueto mensaje de las fuerzas armadas.
El Ejército, preguntado por la muerte de los dos palestinos en Rafah, se limitó a decir que, cuando las tropas abrieron fuego «se identificaron impactos».
Por su parte, los medios palestinos denunciaron esta tarde que dos personas habían muerto en Rafah por disparos de los francotiradores israelíes, entre los que se encontraba un niño (término que utilizan también para referirse a adolescentes).
Bombardeo y explosión
Horas antes, Wafa también había informado de que otros ocho palestinos, entre ellos varios niños, resultaron heridos en dos diferentes incidentes: uno tras el bombardeo de un dron, y otro tras la explosión de un «objeto sospechoso dejado» por las tropas israelíes en la ciudad fronteriza con Egipto.
«El Ejército actúa de acuerdo con el acuerdo de alto el fuego y mantendrá sus líneas defensivas como está acordado», aseguraron las fuerzas armadas.
El acuerdo firmado entre Israel y Hamás de alto el fuego contempla tres fases, de las cuales la primera arrancó ayer y estipula el cese de los ataques y combates en la Franja por un periodo de 42 días, en el que se intercambiarán gradualmente 33 rehenes cautivos en el enclave por cerca de 1,900 presos palestinos.
Fragilidad
Sin embargo, la comunidad internacional ha reconocido la fragilidad de este acuerdo y teme que ataques puntuales del Ejército puedan hacer saltar por los aires esta tregua con consecuencias tanto para los rehenes como para la población gazatí.
Israel y Hamás deben negociar a partir del día 16 de alto el fuego los términos de la segunda fase del acuerdo, que dirigiría a la Franja de Gaza al cese definitivo de las hostilidades.
No obstante, poco después del comienzo de la tregua el ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, ya insistía en que esta era «temporal», puesto que Israel continúa comprometido a desmantelar las capacidades militares y políticas de Hamás. Algo que, reconoció Saar, el Ejército no ha conseguido a pesar de haber mantenido una devastadora ofensiva de 471 días sobre el enclave.
La cifra total de muertos en Gaza por ataques israelíes ascendió 47,035 desde el inicio de la guerra hasta la entrada en vigor del alto el fuego, según el último recuento de personas fallecidas publicado este lunes por el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás.