Cerca de dos millones de niños y niñas accedían a la educación en línea y 1,3 millones se inscribieron en una modalidad híbrida; sin embargo, los ataques recientes contra la electricidad y otras infraestructuras energéticas han causado apagones generalizados que también han afectado la educación. La situación de los refugiados también es preocupante.
Hace 11 meses, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció una “operación militar especial” en Ucrania, un operativo que terminó en invasiones y bombardeos en las principales ciudades, como Kyiv y Járkiv, y la planta nuclear de Chernóbil. Once meses después, se estima en más de 240.000 el número de víctimas de esta guerra. (Lea: Dos de cada tres países se rajan en el cumplimiento de sus objetivos educativos)
Otros de los rezagos de la guerra se han visto en la educación. Según la Unicef los niños y niñas de Ucrania, antes de la más reciente guerra, han enfrentado diversos obstáculos para acceder a la educación. Además de la pandemia por el coronavirus, también llevan más de ocho años de guerra.