Rusia cada vez recurre más a argumentar que las sanciones unilaterales tienen un efecto bumerán y se vuelven contra quienes las adoptan.
Rusia advirtió este miércoles de que todo el mundo sufrirá las consecuencias del embargo parcial europeo a las importaciones de petróleo ruso, y anunció que busca mercados alternativos para minimizar el impacto de este veto en su economía, que será «extremadamente doloroso», según algunos expertos.
«Estas sanciones, desde luego, afectarán a todo el continente: a los europeos y a nosotros, y a todo el mercado energético mundial», dijo el portavoz de Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
La primera reacción oficial del Kremlin llega casi dos días después de que la Unión Europea (UE) adoptase su sexto paquete de sanciones contra Rusia por su «operación militar especial» en Ucrania, que incluye el embargo parcial sobre la importación de crudo ruso, el mayor pilar de la economía rusa.
Según Peskov, Rusia está buscando redirigir a mercados alternativos los volúmenes de petróleo que se verán afectados por las sanciones europeas.
«Se trata de acciones sistémicas que permitirán minimizar las consecuencia negativas», recalcó el portavoz, que insistió en que «los europeos no estarán libres de ellas».
RUSIA ADVIERTE DEL EFECTO BUMERÁN DE LAS SANCIONES
Rusia cada vez recurre más a argumentar que las sanciones unilaterales tienen un efecto bumerán y se vuelven contra quienes las adoptan.
«El mismo petróleo que nos compran a nosotros, lo tendrán que comprar en otro lado, pagar más por él, porque los precios definitivamente subirán», declaró el viceprimer ministro ruso Alexander Novak, cuando la UE aún debatía el sexto paquete de sanciones.
«Europa representa el 15 % del consumo mundial de petróleo. Nosotros suministramos unos 4 millones de barriles, que supone el 3 % de ese 15 %. Tendrán que buscarlo en otros lugares, pero no hay volúmenes extra en el mercado», sostuvo.
Aseguró que Rusia ya ha aumentado los volúmenes de suministro de petróleo a países de la región de Asia-Pacífico, desde donde puede ser redirigido a la UE.
Novak, quien tiene a su cargo todo el sector energético de Rusia, llegó a pronosticar en marzo pasado que en caso de que Occidente renuncie al petróleo ruso el precio del barril podría disparase hasta los 300 dolares.
«Hay quienes ven posibilidades de que aumente hasta 500 dólares por barril» dijo.
El PETRÓLEO, LA GRAN FUENTE DE INGRESOS DE RUSIA
Rusia recauda 800 millones de euros al día con la venta de petróleo a la UE, recursos que emplea, entre otro fines, para financiar su campaña militar en Ucrania.
«No podemos seguir financiando la guerra en Ucrania. Esta decisión cumple con ese objetivo», dijo el ministro de Economía y Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, en una entrevista publicada este martes en la web de «Le Figaro».
Le Maire aludió así al sexto paquete de sanciones que incluye el veto al 90 % del crudo ruso hasta finales de año pero excluye el petróleo que abastece a Hungría, Eslovaquia y República Checa por el oleoducto Druzhba.
Según el ministro, el PIB ruso caerá el 10 % a finales de año debido a las sanciones impuestas por Occidente.
IMPACTO MULTIPLICADOR DE EMBARGO
Para el experto ruso del sector de hidrocarburos Mijaíl Krutijin las consecuencia del embargo europeo sobre la importaciones del crudo ruso serán «extremadamente dolorosas» para la economía del país debido a que tiene un impacto multiplicador.
«A las pérdidas directas por el veto europeo al crudo ruso, explicó, se sumarán las de las compañías que suministran servicios, equipos y materiales al sector petrolero, que se verá obligado a reducir la extracciones por falta de mercado», dijo Krutijin en conversación telefónica con Efe.
En su opinión, el mercado asiático no podrá compensar la pérdida del europeo por que no hay capacidades de trasporte para ello, sin hablar ya del descuento de cerca del 40 % con que vende allí el crudo rusos.
Krutijin indicó que, si bien Rusia puede desviar a Asia parte de su exportaciones de crudo, no podrá hacer lo mismo con los 144 millones de toneladas de derivados de petróleo que exporta anualmente, ya que tanto China y la India cuentan con suficientes refinerías, y se verá obligada a cerrar sus propias plantas.
«Rusia no tiene respuesta al embargo», asevera el experto, que sostiene que el embargo petrolero y las pérdidas añadidas reducirán entre un 20 y 30 % por ciento la partida de ingresos del presupuesto federal de Rusia.
Indicó que las declaraciones alarmistas acerca de que el veto europeo puede llevar a cifras exorbitantes el precio del barril de crudo no tienen asidero.
«Hemos visto las reacciones de los mercados a la aprobación del sexto paquete. Son mínimas», apuntó Krutijin, quien subrayó que en el mercado mundial no se observan signos de desequilibrio entre la oferta y la demanda de crudo.