Honor está generando grandes comentarios con su serie 50. El hermano menor, el Honor 50 Lite ¿estará a la altura?
Honor está buscando consolidarse en el mercado como marca independiente frente a Huawei, logrando tener de regreso una propiedad tan necesaria para muchos usuarios: los servicios de Google.
Para ello, está lanzando la serie Honor 50 al mercado, con el sistema Android completo y todas las apps que ya conocemos, pero que su expropietaria está olvidando por el veto de Estados Unidos.Publicidad
Tras tener en reseña en NIUSGEEK al modelo estándar, ahora tenemos al hermano menor, el Honor 50 Lite, el cual no es precisamente menos pesado o grande, sino que cuenta con especificaciones inferiores. ¿Un gran contendiente para la gama media o un móvil para el olvido?
Especificaciones del Honor 50 Lite
Pantalla: 6.67″, 1080 x 2376 pixeles
RAM: 6GB (también hay versión de 8GB)
Almacenamiento: 128GB
Expansión: sin microSD
Cámara: Cuádruple, 64MP+8MP +2MP+2MP
Batería: 4300 mAh
OS: Android 11
Perfil: 8.5 mm
Peso: 192
Diseño
El Honor 50 Lite es elegante frontalmente y -diremos- “subjetivo” en su parte trasera.
Por adelante contamos con una bella pantalla IPS LDC de 6.67” para la resolución 1080 x 2376. Lo bonito es que tiene un marco muy reducido, por lo que cualquier multimedia será aprovechada al máximo en su uso gracias a estos pequeños biseles.
Otro punto curioso es que la cámara frontal no estará ubicada en la parte central superior de la pantalla, sino al lado izquierdo, tal como lo vimos hace poco en el Xiaomi 11 Lite 5G NE. Decisión curiosa, pero acertada.
Por la parte trasera mencionábamos que era «subjetiva» debido a que no a todos les gustará tener un gran módulo redondo para los cuatro sensores de la cámara frontal. Este sector no sobresale incómodamente, pero visualmente puede ser un poco “agresivo” para muchos.
De manera particular, me gustó el modelado posterior. El equipo en prueba estaba gobernado por un policarbonato negro que funciona como un espejo, del cual, en estilo, solo tengo la queja que absorbe mucho las huellas del usuario. Por fortuna, la caja del Honor 50 Lite nos trae un case incorporado, el cual recomiendo usar.
Vamos por los laterales. En el superior, encontrarás un práctico Jack de 3.5 mm para audífonos junto a unos altavoces. Por el derecho,tendrás la clásica configuración de botones de volumen +/- y el sector de huella dactilar, el cual trabaja también como botón de bloqueo/desbloqueo. Funciona correctamente, con una ubicación a la que ya tenemos que acostumbrarnos porque aparece cada vez en más equipos. Y a su uso, le sumo el reconocimiento facial, el cual me sorprendió por su rapidez y eficacia.
Mientras que en el lateral izquierdo no contamos con mayores usos, la parte inferior está llena con el módulo para tarjetas SIM, el puerto USB-C, el botón de reinicio y el mayor altavoz. Detalle a tomar en cuenta es que no hay ranura para añadir almacenamiento interno.
La denominación «Lite« del equipo no va por parte del peso ni del tamaño: este celular pesa 192 gramos, más que los 175 gramos del Honor 50 estándar, y tiene dimensiones de 161.8 x 74.7 x 8.5 mm frente a los 160 x 73.8 x 7.8 mm de su hermano.
Pese a ello, el agarre y la manipulación del equipo son muy cómodos, con poca probabilidad de que se te resbale. Y si de resistencia hablamos, se nota que es un móvil sólido.
No puedo cerrar este apartado sin dejar de mencionar la gran similitud del Honor 50 Lite con el Huawai Nova 8i. Indiferentemente de si esto es bueno o malo, es un hecho, el cual se compatibiliza con el hardware interno del modelo.
Performance
El Honor 50 Lite tiene un multitasking correcto, mas no sobresaliente, especialmente con programas y aplicaciones pesadas.
¿Hay una razón? El chip. El equipo cuenta con un Qualcomm Snapdragon 662. Este CPU está quedando un poco corto en el gran mercado de apps, especialmente en el de juegos. Y a esto le sumamos -aunque aún no es una necesidad- que no acepta 5G.
No quiero sonar alarmista: he jugado al Pokémon Unite, al Call of Duty: Mobile y al Rocket League Sideswipe a gráficos medios, pero con cierto calentamiento en el equipo y algunas pantallas congeladas. El problema ya es un poco más notorio en juegos demandantes de gráficos a mayor calidad.
El jugador casual tal vez no se haga tantos problemas, pero no es el equipo para el gamer hardcore. Pese a ello, en el resto de las combinaciones, como estar en distintas redes sociales, además de añadidos en segundo plano como Spotify, no habrá mayores inconvenientes.
Pedirle mayor potencia no es un capricho, sino que parte por el mercado. Por ejemplo, otro detalle que me gusta del equipo, pero cuya competencia es fortísima, es la pantalla.
El IPS se ve muy bien con una relación de casi 94% con respecto al cuerpo, pero no tenemos una tasa de refresco mayor a los 60 hercios, característica que hubiese sido bienvenida en el móvil. Eso sí, buenos colores y buena reproducción de multimedia, con un brillo perfecto para interiores, aunque sufriendo un poco en exteriores. Y a la petición, le añado el de un altavoz estéreo.
Por otro lado, tener de regreso a Android está perfecto. Honor lo personaliza con una capa llamada Magic UI, la cual no es invasiva como otras (te hablo a ti, MIUI) ni mantiene tantas herramientas pesadas que suelen entorpecer la experiencia. Es minimalista en gran parte de sus detalles, lo cual me gusta, pero aún debe pulir detalles y aumentar algunas funciones como un modo de juego para sacar de manera rápida pantallazos o capturas de video.
Un grande en batería. Donde sí sobresale como si fuese gama alta es en la carga. El equipo cuenta con una batería de 4300 mAh que se energiza con un cargador rápido de 66W, el cual te carga al 40% en menos de 15 minutos y al 100% en menos de 40 minutos. ¡Golazo! La autonomía del equipo no ha sido un problema y eso que he sentido que lo esforzado al máximo.
Pero también nos debe en cámaras. En el apartado fotográfico, las cámaras trabajan bien, aunque no espectacularmente.
La versión Lite dispone de un sensor principal de 64 megapíxeles, aunque con los mismos sensores gran angular, macro y bokeh del Honor 50. En la cámara frontal, tenemos un sensor de 32 MP.
Un problema que tuve es que el modo retrato no funcionaba en mi equipo: no hubo efecto bokeh, y solo trabajaba con el filtro ‘Belleza’. Vi algunos unboxing en YouTube y un par de bloggers tuvieron el mismo problema, por lo que es posiblemente una falta de actualización para los equipos de reseña, por lo que el usuario no tendrá inconvenientes en ello.
Algo que no quiero dejar pasar de la cámara trasera es que no se ve afectada por las luces de focos o faros en su versión automática, algo que sí pasa con la cámara de selfie, por lo que deberás ser cuidadoso de donde te tomas la foto.
El sensor macro trabaja íntegramente, mientras que el sensor gran angular es un ojo de pez mucho más notorio que en otros equipos.
Sobre el modo nocturno, un pro y un contra. La verdad es que sí mejora enormemente las fotos en escenarios de noche, pero es muy lento, con más de 5 segundos de procesado luego de capturar la imagen.
Algo que pudo mejorar también es el video, con un máximo de calidad de grabación de 1080p con solo 30 frames por segundo.
¿Vale la pena el Honor 50 Lite?
El Honor 50 Lite está lejos de ser un mal equipo, teniendo incluso una estética atrayente y buenos pros como su autonomía y su pantalla casi sin biseles, pero que cuenta con ciertas limitaciones en un mercado cada vez más competitivo y con mejores precios. Pese a que me rindió bien, no sobresalió en mi día a día, por lo que, a menos que lo encuentre con descuentos atractivos, no lo tendría como una de mis primeras opciones.
Equipo reseñado desde el 23/11 hasta la fecha de publicación de este artículo con una unidad cedida a préstamo por Honor Perú.