El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourão, abrió un potencial nuevo conflicto con el gobierno de Argentina. Al defender una política de ajuste fiscal, el funcionario brasileño calificó al país presidido por Alberto Fernández de “mendigo eterno”, el último jueves.
Las diferencias entre ambos países se hicieron notorias desde la asunción de Fernández como Jefe de Estado. “Nos preparamos para lo peor”, manifestó en aquel momento Jair Bolsonaro, el mandatario brasileño.
Bolsonaro había apoyado públicamente la campaña del candidato argentino Mauricio Macri en el 2019. Pero una vez que el partido de Fernández, Frente de Todos, obtuvo el poder, cuestionó la gestión de la pandemia y sus medidas económicas en territorio argentino. El presidente de Brasil incluso declaró que Argentina estaba “pésimamente mal” por “votar partidos comunistas”.
Otras colisiones se produjeron cuando el Congreso Nacional de Argentina aprobó la legalización del aborto, o cuando se le brindó refugio a Evo Morales. Sin embargo, las tensiones parecieron calmarse cuando Bolsonaro respaldó las negociaciones argentinas con el FMI.
Ahora, Hamilton Mourão podría haber reanudado el conflicto a causa de cómo se expresó del vecino país cuando participó en un evento virtual con inversores y empresarios el jueves 8. En dicha reunión, el general retirado de 67 años defendió respetar los principios de responsabilidad fiscal para evitar una “quiebra” en su país.
“No podemos escapar de las reglas de responsabilidad fiscal, si no el país quiebra y, si el país quiebra, vamos a estar igual que nuestro vecino del sur, igual que Argentina, eterno mendigo”, declaró en el evento organizado por la financiera XP.
Mourão también advirtió que la deuda pública brasileña se triplicó en los últimos 12 años, alcanzando cerca del 90% del PBI. Asimismo, agregó que Brasil se encuentra por su séptimo año consecutivo de déficit fiscal.