Fredy Deza, gerente de esta entidad, informó que es posible fortalecer el proyecto piloto de reactivación que implantaron tras la primera ola de la covid-19 “turismo de gratitud”, que consistió en visitas gratuitas a parques arqueológicos a quienes estuvieron en primera línea ante el virus.

Recordó que en el 2020, médicos enfermeros, militares, bomberos, miembros de seguridad ciudadana, limpieza pública, recorrieron el Valle Sagrado de Los Incas y el parque arqueológico de Machu Picchu, como agradecimiento al aporte por la vida durante la pandemia.

“Se han movilizado a casi 5,000 personas con 184 guías en turismo, eso generó la reapertura de Machu Picchu”, afirmó el funcionario, destacando que todo fue en cumplimiento de protocolos de salud y acciones de bioseguridad.

“En este momento quienes pueden hacer turismo son aquellos que ya están vacunados, que en este momento es el sector deprimido, como el sector salud, y aquellos que han pasado por el virus y tienen una inmunidad natural”, especificó.

Para el arribo de este sector que promovería el turismo interno, ya que podrían arribar personas de diferentes departamentos, señaló que se debe firmar un convenio con la PCM “ellos pueden subvencionar y así pueden venir a Cusco”, aclaró.

Según la meta que manejan, en un principio se esperaría a unas 2,000 personas, y si mejora, operadores prestadores de servicio turístico, empresarios y emprendedores, buscarían mejorar su situación al saber que Cusco tiene los sellos de Viaje Seguro a Machu Picchu y regional (abarca a atractivos alternos a Machu Picchu).

Por último, afirmó que esta estrategia apunta a impulsar el turismo receptivo, no solo interno sino extranjero, conforme se vuelve a normalizar la situación y superar la pandemia.