Existe consenso en que la cuarentena focalizada de febrero, tendrá un impacto en la actividad económica del 2021. Por un lado, con un PBI a la baja en enero, febrero y el primer trimestre. Ello traería consigo una revisión a la baja del rebote económico previsto para este año y, más importante aún, aplazaría que la economía alcance los niveles pre pandemia.
Carlos Prieto, gerente de estudios económicos del BCP, señaló que el impacto de la cuarentena focalizada sería parcialmente compensado por el alza de los commodities (el cobre en especial) así como por otros factores externos. Prevé que este año el PBI tenga un rebote de 9%, aunque sería una cifra engañosa.
“Puede ser muy engañoso, primero por un efecto estadístico muy grande, y segundo porque (esa previsión) puede enfrentar riesgos a la baja en función si más adelante se decretan nuevas medidas restrictivas” anotó.
Mercado laboral
Otro factor que escondería una posible recuperación económica de 9% este año es el mercado laboral, reconoce Prieto.
“Además de esconder (el rebote de 9%) el efecto estadístico, esconde un mercado laboral bastante mermado. Lamentablemente, en 2021 veremos un mercado laboral más informal. Esas son malas noticias para el ingreso de las familias y del consumo. Hablamos de un megachoque sobre el mercado laboral tanto formal como informal”, explicó.
El empleo en Lima Metropolitana en el cuarto trimestre del 2020, comparando similar periodo del 2019, mostró una caída de 31% del empleo adecuado, un avance del subempleo en 22% así como del nivel de desempleados e inactivos en casi 30%. A ello se le suma la caída del ingreso mensual real a niveles de hace 8 o 9 años.
Prieto estimó que aquellos trabajadores que logren reengancharse al empleo, lo harán al sector informal o autoempleo, lo que presionaría aún más los salarios a la baja. El BCP estima que en Lima Metropolitana la tasa de desempleo será de 8% y 7%, en el 2021 y 2022, respectivamente. Al término del 2020 este indicador se ubicó en 13%.