El colapso en los hospitales, las largas colas en los centros de abastecimiento de oxígeno y el aumento del número de fallecidos son tres realidades ocasionadas por el disparo de contagios COVID-19 en la segunda ola del nuevo coronavirus en Perú. La positividad diaria de pruebas moleculares del virus en el país se cuadruplicó desde diciembre del 2020, cuando llegó a ser de 5,1 %, mientras que ahora ha alcanzado el 20,4 % según información difundida por el Ministerio de Salud (Minsa). Data de esta cartera señala además que poco más de un millón de personas resultaron contagiadas de la COVID-19 y 42 mil 308 murieron a causa del virus hasta el día 6 de febrero
Sin embargo, el registro de OpenCovid al 7 de febrero, cuya fuente es el Sistema Nacional de Defunciones (SINADEF), indica que son alrededor de 104 mil 200 defunciones que pertenecen a un subregistro desde el inicio de la pandemia en el país, es decir, estas muertes están vinculadas a la presencia del virus en el Perú. Un dato muy importante que podría aproximarnos a una cifra más real del número de infecciones por COVID-19 en el país.
Cálculo del número de infecciones por COVID-19
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que una de las características más importantes del desarrollo de las enfermedades infecciosas como la causada por el SARS-CoV-2 es su capacidad para ocasionar la muerte. «Las tasas de letalidad ayudan a entender la gravedad de la enfermedad, a identificar las poblaciones en riesgo y a evaluar la calidad de la atención sanitaria», indica la organización.
La tasa de letalidad establecida en el mundo por la OMS tiene que ver con distintos factores, señala Patrick Wieghardt, biólogo computacional y miembro de OpenCovid. «La OMS calcula una tasa de mortalidad específica (infection fatality rate o IFR, en inglés) promedio en el mundo de 0.6%. Esta cifra depende de distintos factores que tienen que ver con el sistema de salud y la pirámide poblacional, si hay mucha gente mayor esa cifra va a ser mayor, si hay mucha gente menor esa cifra será menor», dijo para la elaboración de este informe.
Es así como bajo la siguiente fórmula, un cálculo aproximado, que tiene un margen de error, se llega a obtener que en el Perú son 17 millones 366 mil 666 las personas que han sido infectadas con el SARS-CoV-2:
104 200 (fallecidos subregistro SINADEF) / 0.006 (promedio OMS) = 17 366 666 infecciones por COVID-19
Adicional a esta aproximación, un estudio de prevalencia realizado por el Ministerio de Salud en Lima y Callao, entre noviembre y diciembre del 2020, indica que el 39,3 % de la población se infectó.
¿Qué tan real es la cifra de probables infectados?
En septiembre del 2020, el viceministro de Salud Pública de Perú, Luis Suárez, señaló en el programa Agenda Política de Canal N que más de siete millones de personas se habrían infectado de COVID-19 en el país: “En Lima y Callao ya se hizo un estudio que encuentra que el 25% de la población tiene anticuerpos, eso significa la cuarta parte de la población de Lima, aproximadamente 2.5 millones de personas que han estado infectados en algún momento. Si generalizamos al resto del país, fácilmente podría superar los 7,5 millones de infectados, es un estimado” dijo entonces Suárez.
El exviceministro de Salud y epidemiólogo Percy Minaya señala que 17 millones de casos de infecciones por COVID-19 es una cifra es válida, pero que se deben considerar los factores del país que influyen en el desarrollo de la pandemia: «Se podría usar la cifra para una medida de comparación. Aquí es posible que pueda ser más o menos, dependiendo el caso, porque aún no tomamos solo pruebas moleculares con la intensidad que se requiere para que se obtenga una correcta representación de lo que está sucediendo . Los patrones del comportamiento de la epidemia son distintos, por ejemplo, el clima, la dispersión de la población. Es una referencia, puede que no sea exactamente lo que está ocurriendo, pero es un valor aceptado en el supuesto que todo sea homogéneo».
Se debe tomar en cuenta que el registro de muertes en el Sistema Nacional de Defunciones (SINADEF) sigue teniendo deficiencias, señala Minaya. Esto generaría un margen de error en el cálculo para obtener una exacta tendencia de la pandemia: «El margen de error tiene que ver con la calidad del registro del SINADEF, que no está bien establecido y además con su cobertura. Pero ahora pocos distritos se están escapando de ello, pero definitivamente es una cifra válida».
Necesario sinceramiento de cifras
La presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez, señaló en el dominical Punto Final que habría un segundo sinceramiento de cifras respecto a los contagios y muertes por COVID-19: “Hemos pedido a Minsa hacer un nuevo esfuerzo para sincerar las cifras (…) Queremos que la población sepa claramente cuántas personas habrían fallecido potencialmente por esta enfermedad”. A la fecha a través del portal web OpenCovid, cuya data obtenida pertenece al SINADEF, se registra un promedio de 920 muertes no violentas por día; antes de la pandemia se registraban 300, lo que resulta un exceso de 600 muertes diarias.
Ante este constante aumento tanto de contagios y de fallecidos, es necesario conocer cuál es la real magnitud del impacto de este virus desde las instituciones oficiales. «Han pasado 6 meses desde el último sinceramiento de cifras de fallecidos y éste sigue creciendo. Quizá sea un problema de capacidad e infraestructura y la data llega tarde al reporte. Es muy probable que los flujos informáticos no estén automatizados y ese es el problema del sistema», considera Patrick Wieghardt.
Por su parte, el epidemiólogo Percy Minaya dijo que no solo es importante un sinceramiento de datos sino un correcto registro de los mismos: «Es importante que el país tenga en general un buen manejo de datos y no solo sinceramiento de cifras. Se tiene que afianzar el sistema de información, mejorar el registro de algunos datos que son clave. Hay estudios de prevalencia que no han sido públicos, ni liberados, cabe sincerar todo lo que sea posible».