Pese a las advertencias de una segunda ola de casos de COVID-19, hay regiones que no están preparadas, pues no tienen pruebas de detección suficientes.
Una de ellas es Loreto, que actualmente dispone de solo 500 pruebas moleculares. El jefe de la Dirección Regional de Salud (Diresa), Carlos Calampa, explica que la repartición de estas sería equitativa en todos los departamentos, pero ello no ha ocurrido. »Preocupa porque hay intención de reactivar algunas escuelas, universidades, academias y nos dicen que tiene que ser con pruebas moleculares, pero si no las tenemos ¿cómo lo vamos a hacer?».
Actualmente, en Loreto deben cuidar el uso de esta clase de pruebas y solo las utilizan en casos urgentes. Les han ofrecido enviarles más muestras, pero hasta el momento el Minsa no lo hace. Calampa agrega que para el reinicio de las actividades mencionadas necesitarían al menos 50 mil pruebas.
En tanto, en Ica, el titular de la Diresa, Marcos Cabrera, señala que les han dejado de enviar tests rápidos con la promesa de brindarles los de antígenos; sin embargo, a la fecha no les ha llegado. Al momento cuentan con 2.400 pruebas rápidas y 3 mil moleculares, pero solo disponen de insumos para usar 200 de estas últimas. La poca cantidad de pruebas es confirmada por Julio Torres, decano del Colegio Médico del lugar. Mientras tanto, debido a que también deben restringir el uso de las pruebas, en la región han apostado por el Plan Esperanza, que consiste en enfocarse en la prevención de la enfermedad.
Y en Ucayali, según indica el director de la Diresa, Carlos Salas, existe escasez de ambas clases de pruebas. En este momento, la región tiene 2 mil pruebas moleculares disponibles y 200 rápidas. Ayer llegaron otras 2 mil serológicas que sumarían un total de 2.200; sin embargo, el Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (Cenares) les informó que ya no enviarían más pruebas. A Salas le preocupa que haya desabastecimiento.
Y agrega que vienen realizando un estudio de seroprevalencia, cuyos resultados deben estar listos en 10 días.
En norte y sur
En tanto, en el norte del país, el director de la Diresa Piura, Víctor Távara, asegura que solicitará más pruebas rápidas para distribuirlas en distintos establecimientos de salud para el descarte del coronavirus.
Mientras que en La Libertad, han solicitado al Minsa con urgencia una “bolsa” de 200 mil kits de pruebas moleculares para aplicar a la población y así ir descartando el uso de las pruebas rápidas. “Estas no nos sirven para una segunda fase de la enfermedad”, precisa la epidemióloga de la Gerencia Regional de Salud, Ana María Burga.
En el caso de Madre de Dios, el jefe de la Diresa, Ricardo Tello, asegura que disponen de 5.200 pruebas moleculares, que por el momento están bien, así como 3.500 pruebas rápidas; sin embargo, señala que existe el temor de que pueda faltar si los contagios se empiezan a incrementar.
Puno, por su lado, asegura contar con suficientes pruebas moleculares. A la fecha tienen 4 mil y el jefe de la Diresa, Walter Oporto, dice que hay 25 mil más en camino, que han sido adquiridas por el gobierno regional. Ellos ya no cuentan con los resultados de las pruebas serológicas para determinar sus políticas sanitarias, sostiene.
Datos
Arequipa. El jefe del Comando Covid, Percy Miranda, señaló que el Laboratorio de Referencia cuenta con solo 3 mil pruebas moleculares.
Antígeno. En septiembre, la OMS anunció que enviaría 120 millones de pruebas de antígeno de COVID-19 a países de ingresos bajos y medios, entre ellos algunos de América Latina. Estas proporcionan resultados entre 15 a 30 minutos.