De aguas tibias y excelente sol, este balneario es considerado uno de los más importantes de la costa peruana. Destacan sus olas, perfectas para la práctica de surf y el bodyboard.
Al sur de la playa de Máncora, a solo 4 km está la playa Las Pocitas, conocida también entre los lugareños como Máncora Chico: cuando baja la marea se forman piscinas naturales entre las rocas.
Este paraíso norteño ofrece hoteles con spa y servicios de excelente calidad. Se accede a la playa caminando, en taxi o mototaxi desde el pueblo de Máncora. Por su tranquilidad es recomendada para familias y parejas.
Además de las playas, el visitante puede comprar artesanías locales elaboradas con productos marinos, en el paseo artesanal del pueblo de Máncora.
Si dispone de mayor tiempo, a 1 hora se ubica el caserío de Fernández. Se recomienda realizar una caminata por el bosque seco hasta Los Pilares de la Quebrada Fernández, caída natural de agua que forma una laguna entre las piedras.