Las hierbas aromáticas frescas son la mejor opción para infundir su verdadero sabor y aroma a los alimentos que queremos cocinar, pero, la verdad, es que se utilizan mucho menos que las hierbas aromáticas secas, y sobran las explicaciones, la fácil y prolongada conservación de estas últimas. Ahora bien, a muchas personas habría que decirles que hagan una revisión de su cajón de las especias y hierbas aromáticas, porque también caducan.
El caso es que siempre os recomendamos, en la medida de lo posible, que consumáis hierbas aromáticas frescas, y que es mucho mejor tener unas macetas en la cocina o en el espacio que le podáis dedicar, a comprar los paquetes de hierbas aromáticas del supermercado, pues éstos acaban muchas veces estropeándose en el frigorífico, y además de generar desperdicio alimentario, se genera desperdicio de plástico. A esto podemos sumar que el precio de las macetas pequeñas no dista mucho del de las bolsas o paquetes del súper.
Si ya sois o sabéis que vais a ser consumidores de hierbas aromáticas, seguramente conocéis algunos utensilios de cocina que se han diseñado para deshojarlas, pues generalmente se utilizan sólo las hojas y se desperdician los tallos que, dicho sea de paso, también es un error. Según qué receta se vaya a hacer con las hierbas aromáticas, los tallos se pueden incluir. Pero este es otro tema…
Hoy lo que os traemos es un truco para deshojar las hierbas aromáticas con un rallador. Pero antes de pasar al truco os queremos recordar cuál es la técnica para separar las hojas del tallo del tomillo, el romero y demás, para verlo, pulsad este enlace y veréis un vídeo en el que se muestra el sentido en el que hay que tirar de las hojas (o del tallo) para que se desprendan con facilidad.
Como comentábamos, en el mercado hay muchos utensilios que pretenden facilitar el deshoje de las hierbas aromáticas, de hecho, algunos como este, este y este los mostrábamos en Gastronomía y Cía, ya veis que son accesorios de cocina muy simples pero que, en algunos casos, pueden resultar un recurso interesante. Pero lo cierto es que no es necesario comprar ninguno si no os parece que le sacaréis provecho, porque si no queréis hacer esta tarea con las manos, seguro que tenéis un rallador en vuestra cocina.
Pues sólo tenéis que utilizar la parte de rallador más grueso para deshojar las hierbas aromáticas, en las fotos queda perfectamente ilustrado, se introduce por un orificio del rallador grande el tallo y se tira de él para que las hojas se desprendan. Probadlo, y hacedlo en los dos sentidos de las hojas para ver si en sentido contrario a su crecimiento os funciona mejor. Y no dejéis de comentárnoslo, tanto si os convence el truco como si preferís seguir haciéndolo a mano o comprar un pequeño deshojador.